CARNE, ALMA Y ESPIRITU

Estas son palabras controversiales en materia religiosa, pues se interpretan de muchas maneras diferentes, y dependiendo de su interpretación se definen temas como el infierno, la resurrección, etc.  Estas interpretaciones suelen distinguir a una religión de otra. En nuestro caso este tema es indispensable, antes de hablar de la resurrección final, la cual se menciona en la Séptima Trompeta.

Al hablar de Carne, nos referimos al Cuerpo Físico, el cual todos conocemos, pero al hablar de Alma y Espíritu, hay variedad de conceptos, que pueden variar dependiendo de cómo combinemos los términos igualando uno al otro, veamos:

1-    Cuerpo, alma y espíritu, es lo mismo, el cuerpo que vemos, lo es todo

2-    Cuerpo y alma es lo mismo, pero el espíritu es diferente.

3-    Alma y espíritu es lo mismo, pero diferente del cuerpo.

4-    Cuerpo, alma y espíritu, son diferentes, aunque todos reunidos forman al Ser Humano.

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¿Que dice la Biblia?. Vamos a hacer un estudio totalmente bíblico, sin la influencia de ninguna religión, analizando cada concepto.

1-     Cuerpo, alma y espíritu, es lo mismo.

Este concepto sustentado especialmente por materialistas ateos, que creen que con la destrucción del cuerpo físico termina todo, porque no hay nada mas allá, es fácilmente descartado por la Biblia, aunque ellos no creen en la Biblia como un libro inspirado por Dios, sino como una literatura mas. Niegan la fe como fuente para creer algo, teniendo que analizarlo todo a la luz de la ciencia y el método científico, pero apuesto a que ninguno se ha dedicado a dudar que la mujer que dice ser su madre, en verdad lo sea, especialmente después de haber recibido una crianza amorosa, entonces creen eso por fe, pues no tienen ninguna prueba científica, pero no pueden creer en la existencia de un Dios de amor, porque no le ven con los ojos de la cara, tampoco deberían creer en el viento, pero creen porque lo sienten y ven sus efectos, de igual manera es Dios, se siente en el corazón y todo lo que pasa es porque el lo permite. Estas citas, descartan el concepto:                          1 Cor. 2: 14;  Ecl. 12:7.

2-     Cuerpo y alma es lo mismo, pero el espíritu es diferente.

Si aceptamos las citas anteriores, donde se hace separación entre el cuerpo físico y el espíritu, podríamos apegarnos entonces a la idea que cuerpo físico y alma es lo mismo, muchas personas lo creen así, esto da lugar a una resurrección de cadáveres, trayendo de nuevo ese mismo cuerpo físico que murió, a la vida de nuevo, pero eso no es lo que dice la Biblia. Hay gran cantidad de citas que descartan tal concepto:

Is.10: 18; 15: 4; 1 Ts. 4: 4; 1 Re 17: 21, 22; Mt. 10: 28; 2 Cor. 5:6 etc

 Siempre me he preguntado ¿qué pasaría si un cuerpo físico resucitado de carne, cayera de una torre muy alta? Se haría pedazos ¿no?  Tendrían que transformarse en otra forma de materia que no sea carne y sangre, puesto que estas no entran al reino de los cielos 1 Cor. 15:50. Y ¿Cómo es que esos cuerpos físicos se transforman en cuerpos celestiales inmortales? ¿a caso son transformers?.

 Ciertamente la Biblia habla de un cambio o transformación, pero no del cuerpo físico, porque no somos cuerpo físico, somos almas dentro de un cuerpo físico, el cual es cambiado por un cuerpo celeste o espiritual, el cuerpo físico sólo se transforma en polvo.          1 cor. 15: 51- 54.

Para aclarar esto, vasta entender por qué Cristo les dijo a sus discípulos que muchos de ellos, serian atribulados, con todo y eso no perecería ni un pelo de su cabeza, pero mas que un pelo algunos perdieron la cabeza, pues fueron decapitados, otros Cristianos fueron quemados, parecería que Cristo se equivocó, pero no es así, él se refería a sus almas que es lo que se pierde  o salva. Lc. 21: 16- 19.

Ahora bien, algunos toman a Gn 2: 7, donde dice que Adán llegó a ser alma viviente, para justificar que el hombre de Carne y Sangre, es lo que es el alma. Adán no sólo llegó a ser alma, sino que llegó a ser viviente por el espíritu de Dios en él, y esa alma fue puesta en un vaso de barro                   2 Cor. 4: 7.

En AT, a menudo se les llama almas a personas físicas, lo cual no está mal porque el hombre es un alma con un cuerpo físico, como si fuera su casa, eso también ha dado lugar al error, creyendo que se refiere al cuerpo físico y nada mas, la palabra griega para alma en ese caso es NEFESH, esto habla del alma dentro del cuerpo físico, pero luego en NT. La palabra para alma es PSIQUE, esto habla del alma separada del cuerpo físico, a eso se refería Cristo en               Mat. 10: 28.

Abundaremos sobre estos temas por separado, sólo estamos diferenciando un concepto del otro, mostrando que no es lo mismo.

3-     Alma y espíritu es lo mismo, pero diferente del cuerpo. 

Este concepto también es descartado por la Biblia, con tan sólo una cita: 

Heb. 4: 12. La palabra de Dios, divide el alma y el espíritu. El espíritu es que la da vida al alma, a la vez el alma le da vida al cuerpo, a fin de cuentas, la vida está en el espíritu.

4-     Cuerpo, alma y espíritu, son diferentes, aunque todos reunidos forman al Ser Humano.

Este es el concepto que respalda la Biblia, confirmado también con una sóla cita: 1 Tes. 5: 23: Sean conservados el cuerpo, alma y espíritu de ustedes.

Una vez, aclarado esto, vamos a estudiar cada concepto por separado. Para abundar y demostrar que esto es una Realidad Bíblica, mientras que los demás conceptos son Relidades Bíblicas, o sea, realidades de acuerdo a las religiones, que usan la Biblia, pero mal interpretada, ademas conceptos basados en la filosofía etc.

A_ LA CARNE O CUERPO FISICO

Nos vamos a referir al hombre como cabeza de la creación de Dios en la tierra Gn 1: 26, sabiendo que en el mundo espiritual, no hay superioridad del hombre sobre la bestia Ecl. 3: 19- 21.

Todos sabemos lo que significa el cuerpo físico, pero abundemos un poco sobre lo que dice la Biblia de este.

1- La palabra de Dios, no sólo alimenta el espíritu, sino que también se refleja en la carne, y se traduce en salud para esta.       Pv. 4: 20- 22.

2- Sobre todo, debemos guardar nuestro corazón, la base de la vida física, es el primer órgano que se forma. Pero no sólo haciendo ejercicios físicos y cuidándonos de alimentos perjudiciales, sino también no guardando odios, no siendo falsos sino sinceros delante de Dios y los hombres, lo cual permite una franqueza de expresión y una mirada penetrante, cuando nos guardamos del mal..  Pv. 4: 23-27, Mt. 5:8.

3- Con el corazón, llegamos a cumplir el primer gran mandamiento         Mt.22: 37, 38. Poner, cualquier persona o cosa primero que Dios, es idolatría, por lo tanto nuestro propio corazón nos puede engañar. Dios es mayor que el corazón 1 Jn. 18- 22; Jr. 17: 9, 10, Ez. 14: 4,5.

4- nuestro cuerpo carnal, es el cuerpo del pecado, el que nos esclaviza, debido a esto es un cuerpo mortal.  Rm. 6: 6, 12;  7:24, 25;  Jn. 6: 63.

5- El diablo es el causante de la muerte física, valiéndose del temor a esta, para reinar entre la humanidad. Hb. 2: 14.

6- Hasta Cristo murió en cuanto a la carne, para condenar al pecado en la carne, y vencer al diablo Rm 8: 1-8;  1Pe 1: 24;  3: 18.

7- Las apariencias físicas son vanas y engañosas.

Gl. 6: 12, 13;   1 Jn. 2: 16.

8- El guerrear del Cristiano no es contra carne ni sangre, sino contra los demonios que se esconden detrás de la carne. Ef. 6: 12.

Respecto a este último punto, tenemos que hacer aclaraciones, es cierto que hay que identificar al verdadero enemigo, pero también tenemos que defendernos del instrumento del enemigo, más no agredir al instrumento.   Por ejemplo. Hagamos una comparación:

 Si un enemigo humano nuestro, tiene un auto, y en una ocasión trató de echarnos el auto encima, sabemos que el auto no es el verdadero enemigo, pero cada vez que veamos ese auto en la calle, tenemos que estar en guardia para defendernos de éste, lo mejor sería evitar al auto.

 Si el dueño llegara a vender dicho auto, ya este no sería un peligro  para nosotros.

Esto equivale a decir que si Satanás nos ataca a través de un humano, sabemos que el enemigo real no es el humano, pero es como el auto, oramos para defendernos de Satanás, pero siendo este humano un instrumento puesto a su servicio, no podemos simplemente ignorarlo, hasta que  Satanás salga de este humano, y deje de ser su amo, no deja de ser un peligro, lo mejor es, no acercarnos a esa persona, sin llegar a ser enemigos, orando por su liberación.

EL ALMA

El alma, es lo que Dios ve del Ser Humano, ya que el no da importancia a la apariencia física de la carne, el alma es la esencia del Ser, el cuerpo es tan sólo un vaso, donde se asienta dicha esencia    Jn. 6: 63.

Usted se preguntará ¿En que consiste dicha esencia? Lo primero que hay que aclarar es que no es nada material físico, no es la Sangre, puesto que Dios mismo posee un alma, pero no tiene carne y sangre, es espíritu.        Lev. 26: 11;  Jn 1: 18;  4: 24.

Hay una cita que da lugar a confusión, porque parece confirmar que el alma es la sangre, esta cita es tomada por grupos como los Testigos de Jehová, los cuales están a la cabeza con este concepto, me merecen mucho respeto, ya que aciertan mas que otras religiones Cristianas en cuanto a doctrinas bíblicas, pero este punto en particular, deberían revisarlo mejor, pues es la misma Biblia que usan, Traducción del Nuevo Mundo de las Sagradas Escrituras la que mejor aclara el concepto  y dice así: Lev. 17: 14 
 porque el alma de toda clase de carne es su sangre en virtud del alma en ella..........

Lo que interpreto y armoniza con el resto de la Biblia, es que el alma de la carne es la sangre, debido a que la verdadera alma inmaterial, se asienta sobre la sangre, es decir, la parte física donde  reposa el alma, es en la sangre.

Ahora bien, como la sangre llena todo el cuerpo de los pies a la cabeza, entonces el alma es sobre todo el cuerpo, de hecho se identifica plenamente con el cuerpo físico, toma su misma forma puesto que es el vaso que la contiene, si sufre el cuerpo, sufre el alma  Job 6:7;   Sl. 69: 10.

Es el mismo Cristo quien aclara, que la destrucción del cuerpo, no implica  la destrucción del alma, por tratarse de algo inmaterial, sin embargo, también aclara que el alma no es inmortal, puesto que Dios puede matarle, eso le quita el titulo de inmortal, título que quiso darle el propio Satanás. Gn 3: 3, 4;  Ez. 18: 20;  Mt. 10: 28.

Ha llegado el momento, de que establezcamos un término que describa  lo que verdaderamente es el alma, un término que armonice con todo lo antes dicho y con toda la Biblia, el término escogido es: ¨El Yo Soy¨ psicológico e individual de cada Ser es la verdadera identidad de cada quien, en griego se describe acertadamente en NT como Psique.

El alma es la verdadera persona, sus recuerdos desde la infancia, emociones, su nombre, preferencias, conocidos, familiares etc. Todo eso esta encapsulado en la expresión: Yo Soy Juan, o Pedro etc.

Mas que por nuestro cuerpo físico, nos identificamos por nuestro historial de vida, único y exclusivo, un historial donde aparecen nuestros gustos y preferencias, y secretos que sólo Dios sabe, pues dicha información se guarda en nosotros mismos. Podría haber gemelos idénticos, pero el Psique, siempre será diferente.

Mas que un cuerpo en el espacio, somos información exclusiva en el tiempo, información que se guarda en una conciencia de existencia, y esa conciencia es un Ser llamado espíritu, sobre el cual abundaremos mas adelante.

 Cada noche usted tiene experiencias de este tipo, pues en cada sueño su alma sale de su cuerpo carnal, para tener experiencias en un cuerpo espiritual, su alma es usted mismo, toda su información la lleva aun fuera de su cuerpo, esa información es su identidad en el mundo espiritual, pero si se pierde esa información sobre si mismo, entonces se pierde el alma, se pierde el Yo Soy y sólo queda una conciencia de existencia sin identidad, el Ser no sabe quien es, sólo sabe que existe, como un CD o memoria electrónica, que se le borra toda la información y queda en blanco. Sólo Dios puede borrar esa información sobre nosotros mismos en nosotros mismos.

 Crea en las palabras de su hijo el Cristo enviado a la tierra y su alma será guardada, usted mismo con todos sus recuerdos.

Podríamos a continuación escribir sobre el espíritu, pero hay tanto que escribir  sobre el espíritu, que prefiero hacer una parte 2 sobre este tema, en la próxima ocasión.

SHALOM